Saltar al contenido

Despido objetivo por Causas Economicas

octubre 27, 2020
Despido objetivo por Causas Economicas

En el mundo laboral, existen muchas razones por las que puede justificarse un despido; tanto por cuestiones propias de la empresa y ajenas al trabajador, como por incumplimientos de la norma por parte de los empleados. Estas motivaciones de despido indican el tipo del cual se trata, lo que ayudará a comprender cómo serán las condiciones en este penoso proceso.

En líneas generales, hay dos tipos de despido, el disciplinario y el objetivo. El primerio hace referencia a los despidos por actitudes y aptitudes indebidas del trabajador en su labor dentro de la empresa; mientras que el segundo se debe a condiciones de la compañía que requieren de la reducción del personal para garantizar su sostenibilidad.

Si continúas leyendo, te encontrarás con un tipo de despido objetivo, sus características, condiciones y todo lo que necesitas saber sobre él en caso de que te veas involucrado de alguna forma en un despido por causas económicas.

¿Qué es un despido por causas económicas?

El despido por causa económica se encuentra dentro de los despidos objetivos; este corresponde a problemas de liquidez en la empresa, por lo que se ven en la necesidad de reducir costos, en este caso los costos de nómina.

Puede aplicarse a un solo empleado o a varios al mismo tiempo, según sea necesario. Para ejecutar este despido es obligatorio que la empresa u organización justifique debidamente con documentos que ilustre el estado de su economía y compruebe el problema por el cual se debe ejecutar un despido de esta naturaleza en pro de evitar que las finanzas de la organización se vean empeoradas.

La empresa no solo deberá comprobar sus problemas económicos, también tendrá que explicar cómo esta infortuna situación influye en el contrato laboral al que se le pretende dar fin y demostrar que la acción del despido es la más adecuada luego de considerar otras alternativas de solución.

Despido objetivo por Causas Economicas

¿Qué información debe revelar la empresa?

En el instante en que se expresa la decisión de aplicar despidos por causas económicas, la empresa lo deberá hacer por medio de una carta en donde tendrá que especificar, sin dejar cabida a la duda, cuál es la situación económica que esta alega en justificación para despido colectivo o individual.

En este punto, la empresa no tiene obligación alguna de revelar absolutamente toda la información y documentación referente a sus finanzas. A lo que sí está obligada es a mencionar con detalle el argumento.

Solo en caso de que un trabajador afectado por la decisión impugne la medida ente un juez, la empresa sí tendrá que compartir y revelar toda la documentación de sus finanzas que requiera el caso en un plazo de no mayor a 20 días hábiles.

¿Cómo se le informa al trabajador de un despido por causas económicas?

Existe un protocolo a seguir antes de ejecutar definitivamente un despido objetivo por causas económicas. Este procedimiento protocolar se compone de la notificación a través de una carta escrita y un tiempo estipulado para su entrega.

Notificación de despido

La empresa tiene el deber de enviar una carta a cada trabajador involucrado en la medida de despido objetivo, donde especifique el motivo. La carta no tiene que contener información fiscal muy detallada, pero sí se debe aportar la información suficiente para que le empleado comprenda que la razón de su despido inminente es por cuestiones de la empresa y no por alguna falta que haya cometido en su actividad laboral.

Con esta medida, se garantiza que el empleado no quede en una situación de desconocimiento en la que no cuente con recursos argumentativos y lo deje en un estado indefenso que no le permita defenderse si así lo desea ante un juez, jurado o directivos de la empresa.

Tiempo de aviso

Luego de haber realizado efectivamente la entrega de la notificación de despido por causas económicas, la empresa deberá otorgar un plazo de 15 días al empleado afectado entes de la finalización oficial del contrato laboral. La notificación tendrá que entregarse tanto al trabajador como al departamento legal de trabajadores para que estén al tanto de toda la situación.

Esta norma pretende darle la oportunidad al trabajador, nuevamente, de defenderse si lo cree necesario, o de iniciar la búsqueda de su nuevo empleo antes de que pierda inminentemente el actual.

Indemnización en el despido por causas económicas

Ya que esta decisión no se motiva precisamente por faltas del empleado, es obligatorio que se acompañe de una indemnización. En este caso, esta deberá tener un valor equivalente al salario de 20 días por un año entero de trabajo, con un máximo de 12 cuotas mensuales.

La forma en la que se calcula dicha indemnización es a partir del tiempo de antigüedad del empleado como elemento activo de la empresa, esto incluye todos los contratos de trabajo en los que está involucrado y su salario. El monto que se debe utilizar para el salario es el del último sueldo que el empleado gozó antes de ponerle fin a su relación laboral con la empresa.

En el caso de que la organización no abone en forma debida la indemnización, el despido será declarado por un juez como improcedente; la única justificación valida que evita dicha sentencia, es que la empresa demuestre que no posee la liquidez suficiente como para poder cancelar la indemnización. Para esto se deberá presentar toda la información requerida para comprobar que dicha justificación es válida.

¿El trabajador puede objetar el despido por causas económicas?

La respuesta a esto es sí. En caso de sufrir un despido objetivo por causas económicas, el empleado puede objetar y presentar su argumento ante los tribunales dentro de un plazo no mayor a 20 días hábiles luego de haber sido notificado acerca de la medida que lo desvincula laboralmente; esto con la intención de que se declare nulo o improcedente, dependiendo de los argumentos que presenten.

De presentar un caso en el que claramente el empleado ha sido afectado negativamente en forma innecesaria, se podría lograr la readmisión o que se le otorgue una indemnización con monto mayor al propuesto por la empresa en un principio. Este procedimiento primero busca un acuerdo entre las dos partes, pero, de no lograr llegar a unos términos satisfactorios, el trabajador podrá presentar formalmente una demanda si es que considera que la empresa carece de justificación valida.

Regulación del despido por causas económicas

El artículo 51.1 del Estatuto de los Trabajadores, está dedicado a la regulación específicamente del despido objetivo por causas económicas. En este artículo se establece que este tipo de despido se fundamente en el registro de pérdidas actuales o predichas y la constante caída en el número de ingresos ordinarios o ventas. Ninguna causa de tipo económico puede justificarse por factores externos a la empresa.

Las justificaciones económicas para el despido objetivo, deben presentarse y encuadrarse como parte de un plan para el mejoramiento financiero de la empresa; donde además se demuestre que el despido es un aspecto indispensable de dicho plan, por lo que la reducción del personal es necesario para evitar escenarios desagradables para la economía de la empresa, que no solo afectaría a la junta directiva e inversionistas, sino también al resto de trabajadores que quedan activos como beneficiarios de un sueldo y prestaciones.

Juzgados de lo social, son los encargados de validar los despidos por causas económicas, ellos deberán estudiar a fondo el caso para validar o invalidar la justificación que presenta la empresa para poner fin a un contrato laboral.

No existe a nivel legal un valor específico para que las perdidas sean las suficientes como para justificar el despido objetivo, pero sí se debe demostrar una persistencia importante de ellas.

¿Cómo comunicar verbalmente el despido?

Si eres parte del equipo de recursos humanos de una empresa que ha decidido ejecutar uno a varios despidos objetivo por causas económicas, es tu responsabilidad hacer llegar esta infortunada noticia en forma verbal a cada uno de los empleados involucrados o afectados por la aplicación de la medida.

Es importante que dejes salir a relucir toda tu capacidad de hablar con tacto, mientras te aseguras de hacerle entender al trabajador y dejarle totalmente claro que no se le despedirá por algún mal rendimiento profesional, sino que se debe a una situación adversa para la economía de la empresa, originada bien sea por una mala gestión o toma de decisiones por parte de la directiva y cuerpo gerencial, o por condiciones del contexto que afectan a la organización, como la economía nacional. Esta ya será una noticia desagradable de escuchar por parte del empleado, más desagradable la será aún si piensa que es por su desempeño cuando realmente no es así.

Asegúrate de escucharlo atentamente y aclarar todas sus dudas, seguramente las tendrá, y por ningún motivo olvides entregarle la notificación por escrito que exige la ley.

Causas económicas que justifiquen el despido objetivo

Como ya te había mencionado anteriormente, el artículo 51.1, nacido en la reforma del 2012 del Estatuto de trabajadores, especifica unas causas económicas que justifican la ejecución de despidos individuales o colectivos dentro de una empresa. Básicamente estas casusas son: pérdidas actuales, pérdidas futuras o previstas y disminución constante de ingresos o ventas; de ellas te hablaré con más detalle a continuación.

Pérdidas actuales

Con respecto a las pérdidas actuales como justificativo para despidos objetivos, vale la pena mencionar que, a pesar de que parece ser una causa fácilmente identificable y carente de subjetividad, no ha sido excluida de la controversia cuando se recurre a su aplicación como razón innegable para reducir los gastos de nómina.

Lo que más se hace objeto de debate en cuanto a esta situación es el hecho de si realmente la existencia de pérdidas en un momento determinado de la empresa, implica que se encuentre en una situación lo suficientemente negativa o perjudicial como para tener que optar necesariamente por una medida tan drástica como el despido de uno o más empleados al mismo tiempo.

Un ejemplo que ayuda a ilustrar el origen de la posible duda ante la validez de esta causa como justificativo de despido, es una empresa que lleve una vida económica sana, con un ritmo estable en el que las solicitudes de productos o servicios son constantes e incluso crecientes, y no existe registro de caídas en la carga de trabajo. Pero, en un momento coyuntural en el que, debido a una mala decisión en cuanto a una inversión financiera, la empresa obtiene un registro de perdida que deberá contabilizar, haciendo así que el resultado del ejercicio sea negativo para ese instante; realmente esta situación podría ser mala, quizás por uno o tres meses, pero gracias al ritmo constante, la organización podrá recuperarse por sí misma sin tener necesariamente que recurrir al despido de trabajadores.

Pérdidas futuras

Tanto en las mesas de negociación como en los tribunales, la predicción de pérdidas importantes como causa justificativa de despido, tiende a ser altamente cuestionables. El hecho es que se trata de una suposición o afirmación basada en una estimación resultante de un estudio basado en las bases de datos de la empresa referentes a las actividades productivas de la misma.

Para que el uso de esta justificación proceda, la empresa deberá revelar detalladamente la metodología que emplearon para calcular sus estimadores financieros; al igual que toda su data para comprobar que los cálculos son correctos. A pesar de esto, siempre existe un grado de incertidumbre, pues las estimaciones nunca son exactas.

Disminución constante de ingresos o ventas

A diferencia de las anteriores, esta es la causa económica más objetiva y de validez fácil de considerar. Esta se basa en la disminución de ingresos constante durante al menos tres meses consecutivos; lo que hace sencilla la comparación con periodos anteriores y se evitan las incidencias de los negocios que comúnmente tienen periodos estacionales en cuanto a sus ventas por las condiciones naturales del mercado.

Los despidos por causas económicas son, sin duda, uno de los despidos objetivos más empleados y que pueden resultar ser muy controvertidos dependiendo de la justificación especifica que se utilice. Es de suma importancia cumplir con los plazos de notificación para evitar invalidar el proceso gracias a un simple elemento protocolar.

Para mantener esta web uso cookies que se instalan en tu dispositivo, propias (necesarias para la web) y de terceros (analíticas, elaboración de perfiles y publicitarias) para crear un perfil según tus hábitos de navegación. Puedes cancelar todas o ajustar las cookies según quieras; o aceptarlas clicando en "Aceptar" y seguir navegando. Te aconsejo leer la Política de cookies.

ACEPTAR
Aviso de cookies